Nueve países europeos han optado por la suspensión del uso de la vacuna contra el Covid-19 producida por la farmacéutica AstraZeneca, ya que se estaban detectando casos graves de trombosis a quienes se les aplicaba.
Dinamarca, Islandia y Noruega fueron los primeros en suspender la aplicación del biólogo desde este jueves, mientras que Austria se les unió durante la tarde del mismo día.
Estonia, Lituania, Letonia y Luxemburgo, anunciaron más tarde que dejarían de administrar las dosis, debido a casos graves de coágulos sanguíneos en personas que recibían la vacuna anticovid de AstraZeneca.
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y la farmacéutica AstraZeneca continúan asegurando que estas dosis son seguras y efectivas, pero aún así realizarán una segunda para evaluar a los afectados.