El presidente Andrés Manuel López Obrador se pronunció en contra de que se le rinda culto a su imagen y ya dejó en su testamento la prohibición para le pongan su nombre a calles, hospitales o escuelas.
«Ya no es tiempo de rendir culto a las personalidades; en mi caso, tengo escrito en mi testamento que no quiero que se use mi nombre para nombrar ninguna calle, no quiero estaturas, no quiero que usen mi nombre para nombrar una escuela, un hospital… nada absolutamente», refirió en su conferencia matutina de este viernes.
Consideró que el mejor homenaje que se le puede dar a los dirigentes o héroes es siguiendo su ejemplo, «no convirtiéndolos en piedra», subrayó López Obrador.